En su reciente edición, el Jueves Minero organizado por el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú reunió a jóvenes profesionales para compartir sus puntos de vista acerca de la coyuntura nacional, las oportunidades de crecimiento y el rol del sector minero en el desarrollo territorial.

Yuliño Anastacio, CEO de Govierna e Infox, observó que si bien el Perú creció a una tasa de 4.5% en las dos últimas décadas, “está quebrado políticamente”, pues en el reciente quinquenio tuvo que soportar la vacancia de cuatro presidentes y la disolución de una representación congresal.

Además, remarcó que otra de las falencias del país ha sido el desinterés en forjar capital humano talentoso y capacitado que brinde soporte al desarrollo económico, el cual no está llegando de forma descentralizada y se manifiesta de mejor manera en algunas regiones que en otras.

Igualmente, expresó que no hay país que no se haya desarrollado sin el trabajo conjunto entre el Estado y el sector privado, ya que el primero está a cargo de la creación del marco normativo, mientras que el segundo tiene la eficiencia y disciplina para catalizar el bienestar social.

Asimismo, advirtió que parte de la ciudadanía se convenció por el falso discurso de la maldición de los recursos naturales, lo que les impide creer en la industria minera como un vector esencial para llevar servicios básicos e infraestructura de primer nivel y empleo digno.

“Sentirnos orgullosos de nuestros recursos naturales es el primer paso para a dirigir un país con estas fortalezas y trabajar debilidades. Los grandes cambios vienen con un gran equipo detrás, es realmente la acción de todos los actores, jóvenes y adultos”, reflexionó. 

Con el aporte principal de la minería, resaltó que el promedio de vida se incrementó tres veces, los recursos económicos crecieron diez veces y la pobreza disminuyó treinta puntos básicos desde la década de 1990, evidenciando el “milagro económico” sucedido en el país.

Jóvenes deben asumir el rol de futuros líderes

Por su parte, Anggy Acuña, estudiante de Ingeniería de Minas y ganadora de la Onza de Oro del IIMP, enfatizó que la elección de un buen líder es esencial para superar los diferentes desafíos a nivel país, como la desigualdad, la corrupción, la discriminación y la violencia. 

Bajo esta premisa, sostuvo que la elección de nuevas autoridades podría tener un gran impacto en el desarrollo de la actividad minera, por lo que consideró que los actores de la industria minera estén involucrados en la discusión y toma de decisiones que atañen a la vida política.

También, reconoció que los jóvenes serán los futuros líderes y que por tanto deben informarse y capacitarse para estar a la altura del debate de los problemas sociales y políticos del país, y trabajar en equipo para construir un mejor porvenir para todo el colectivo.

“Para mejorar la percepción de los jóvenes peruanos acerca de la actividad minera, es necesario educar, destacar los beneficios económico, promover la sostenibilidad, mostrar la innovación tecnológica y fomentar la responsabilidad social en las empresas mineras”, propuso.

Minería ha multiplicado beneficios para la sociedad

En tanto, Fiorella Torres, VP de BlueOrchard, calificó que la última década ha sido de oro para el Perú, debido a que creció al doble de la tasa promedio de Latinoamérica, impulsado en gran parte por el sector minero como consecuencia de los altos precios y la recuperación de China.

No obstante, reveló que las nuevas generaciones creen erróneamente que la actividad minera contamina, destruye y es responsable del cambio climático, no siendo así en la realidad, ya que el sector realiza esfuerzos por reducir su huella ambiental y multiplicar los beneficios sociales.

Por el contrario, sinceró que, pese al boom de los precios de los minerales y los mayores recursos económicos provenientes de la minería, los gobiernos subnacionales poco hicieron para invertir en educación, salud e infraestructura y por mejorar las capacidades productivas.

“La minería es un sector que tiene amplio potencial, hay proyectos mineros que ya comienzan a producir y los factores externos se presentan a favor nuestro, pero lamentablemente tenemos poca inversión privada local y foránea en el Perú para este año, reflexionó.