Los past presidentes del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP) plantearon diversas ideas e iniciativas orientadas a que los recursos que el fisco recibe provenientes de la minería, sean debidamente canalizados hacia la realización de auténticas obras de desarrollo de creciente impacto socioeconómico con el debido cuidado ambiental en las zonas de sus operaciones y alrededores.

Con ocasión del 78 aniversario del IIMP, y en el marco de una diversidad de actividades, los líderes de dicha entidad participaron en el foro denominado “El Futuro de la Minería en el Perú”. ProActivo recogió sus declaraciones.

Raúl Benavides: Agencias de desarrollo regional y local

Raúl Benavides propuso la creación de agencias de desarrollo para las regiones, que brinden apoyo a los gobernadores regionales y alcaldes, quienes muchas veces quedan frustrados por no haber podido ejecutar las obras al final de sus gestiones.

“Un gobierno regional en su primer año arma su equipo, en el segundo comienza a perfilar sus proyectos y al tercer y cuarto año inician su ejecución, pero no concluyen por falta de tiempo, y la siguiente administración no continúa esa obra y se pierde lo que se hizo en la gestión anterior. Por eso tenemos una baja ejecución de presupuestos en los gobiernos regionales y locales”, explicó.

Ante esa situación, Benavides propuso implementar agencias de desarrollo regionales y locales, como lo es por ejemplo, la Asociación los Andes de Cajamarca, que con recursos de la minería y el apoyo de las autoridades, sociedad civil, Iglesia y la academia, está realizando obras de desarrollo en esa jurisdicción. “En la Asociación los Andes se tenía los proyectos hechos por las gestiones regionales anteriores para construir sobre lo avanzado. Hay que tener una continuidad de los planes y proyectos”, agregó.

El ejecutivo subrayó que la minería tiene capacidad de gestión capaz de ayudar en ese campo, como ocurre con Obras por Impuestos, y puede generar de alguna manera un mecanismo similar al aporte voluntario, que logró concretar grandes proyectos, porque se pudo concertar con las autoridades y la sociedad civil, los planes de obras prioritarias.

Aseguró que con ese tipo de acciones se pueden superar las desigualdades tan grandes que hay en el Perú en materia de desarrollo humano. “Tenemos que lograr que los hijos de los campesinos alrededor de nuestras operaciones, tengan las mismas oportunidades que tienen nuestros hijos. Si logramos eso, estaremos trabajando activamente por un Perú mejor”, anotó.

Rómulo Mucho: La descentralización fue un fracaso

Rómulo Mucho expresó que las antiguas corporaciones de desarrollo de antaño, tenían mucho mejor efecto que la actual descentralización mal diseñada y mal ejecutada ha llevado a que desde hace 20 años se dé mal uso a los fondos que la minería destina a los gobiernos regionales y locales.

“Otro factor en contra es la impunidad. No hay castigo para las autoridades que delinquen con los recursos públicos, aunque hay que reconocer que en los últimos años ya se han castigado a diversas autoridades regionales y alcaldes corruptos”, apuntó.

También señaló que la Contraloría premia a las autoridades que hayan ejecutado un 90% de su presupuesto, pero no dice nada de la calidad de ese gasto. “No se dice si tal o cual inversión ha traído algún beneficio en el cierre de brechas socioeconómicas, y las comunidades siguen reclamando con toda justicia de que el desarrollo de la minería no llega. Con excepciones, obviamente”, indicó.

De igual modo, consideró que en estos tiempos, la minería tiene que ir cambiando de discurso. “Tiene que idear un modelo de discurso distinto al de los miles de millones, las transferencias y los impuestos que paga. Hoy, la minería tendría que hablar más de la gestión de los conflictos y convertirlos en oportunidades. Es la forma de seguir avanzando”, demandó.

Antonio Samaniego: Capacidad de gestión de mineras debe fluir hacia las regiones

Antonio Samaniego anotó que los campamentos mineros de antaño eran abiertos para las comunidades de sus alrededores, y las que se hicieron ciudades alrededor de ellos, “pues había una comunicación fluida y la población entendía mejor a la minería”.

“Esa vivencia que se tenía entre la minería y sus trabajadores con la población ya no existe ahora. Al contrario, ahora tenemos campamentos enclaustrados, cerrados, no te dejan acercarte, y si no tienes una SCTR, no te dejan entrar”, citó.

Asimismo, criticó la ineficiente gestión de gastos de los recursos mineros de las autoridades regionales y locales. “El día de hoy, si bien hay dinero para las poblaciones, para los distritos o las municipalidades, la capacidad de gasto, de gestión, es prácticamente nulo”, lamentó.

“La capacidad de gestión de las empresas mineras tiene que fluir hacia los gobiernos regionales y municipios para ayudarlos a gerenciar eficientemente sus recursos con obras de desarrollo”, planteó.

Otro aspecto que observó fue el diseño para los cierres, que requieren ingeniería atenta a la calidad del agua. “Si uno soluciona el problema del agua, soluciona el resto de cosas que están alrededor”, dijo.

Juan José Herrera: Es fundamental un plan de desarrollo participativo

Juan José Herrera pidió encaminar los grandes flujos de dinero de la minería a un uso efectivo en favor de las poblaciones más necesitadas del entorno de las operaciones mineras, a través de programas idóneos.

“La experiencia del programa minero de solidaridad con el pueblo, financiado por el aporte voluntario, vigente desde el 2007 hasta el 2012 fue muy buena y efectiva. Se construyeron fondos a través de convenios entre las empresas y el Estado y se invirtieron positivamente en el mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones asentadas en la zona de influencia de los proyectos y operaciones mineras”, recordó.

Detalló que se destinó grandes sumas de dinero en nutrición, educación y salud dentro de una estrategia de lucha contra la pobreza. “Este mecanismo benefició a 18 regiones, 110 provincias y 376 distritos, y permitió realizar más de 2 000 proyectos, principalmente de infraestructura y educación”, mencionó

“Es fundamental que las poblaciones cuenten con un plan de desarrollo elaborado de manera participativa, identificando sus reales necesidades para lograr una mejor calidad de vida y reducción de la pobreza”, puntualizó.

Augusto Baertl: La minería cuenta con recursos y capacidades para su desarrollo

Augusto Baertl expresó su optimismo por un mayor desarrollo de la minería peruana en los próximos años, dado su gran potencial de recursos minerales y capacidades de profesionales y técnicos peruanos.

“Tenemos gente capaz de hacer minería en los diferentes niveles y con tecnología de punta que se usa en todas partes del mundo, para así tener una operación minera eficiente que cumpla con su rol social y de cuidado del medio ambiente”, refirió.

Jorge Ardila: La minería puede fortalecerse por los actuales precios

Jorge Ardila sostuvo que la minería peruana puede ser fortalecida con el incremento de los precios de los metales, especialmente del cobre, “por lo que no se entiende por qué existe tanta oposición a la minería en el país”.

“La minería hace cosas buenas. Sin embargo, los no amigos de la minera no reconocen sus méritos. Tenemos propuestas y soluciones para todos los problemas. El problema ahora es ideológico”, mencionó.

Fuente: Proactivo